En el
primer año, los bebés aprenden a enfocar la vista, a alcanzar, explorar y
aprender sobre las cosas que tienen alrededor. A través del juego los niños interactúan
con su entorno próximo, elaborando así esquemas mentales que les permiten
organizar comprensivamente el mundo que los rodea. Durante esta etapa, los bebés también forman
lazos de cariño y confianza con sus padres y otras personas como parte de su
desarrollo social y afectivo. Aquí os mostramos distintas actividades que
realizan nuestros “pitufos” en su rutina diaria .
JUGAMOS CON NUESTROS AMIGUITOS
VEMOS LOS CUENTOS
MANIPULAMOS PAPEL
DISFRUTAMOS CON LOS CIRCUITOS
NOS CONVERTIMOS EN PEQUEÑOS PINTORES
NOS LAVAMOS LAS MANITAS